Erik Lernestål es fotógrafo en los Museos Nacionales de Historia de Estocolmo (Suecia), una agencia gubernamental dependiente del Ministerio de Cultura sueco. El grupo gestiona seis museos individuales, además del mayor equipo de arqueólogos del país.
Estos seis museos son el Museo Hallwyl, el Museo de Historia de Suecia, la Armería Real, el Castillo de Skokloster, el Museo del Molino de Papel Tumba y el Gabinete Real de Monedas.
Su propósito es fomentar el conocimiento y el interés por la historia de Suecia, además de conservar e impulsar el patrimonio cultural a su cargo. Apoyan la accesibilidad y la difusión, por lo que sus recursos digitales (base de datos de la colección, imágenes en 2D de alta resolución, modelos en 3D, etc.) están disponibles pensando en el usuario y se pueden utilizar y reutilizar bajo licencias abiertas.
«La mayor parte de la población mundial nunca visitará nunca ninguno de nuestros museos», afirma Erik. «Pero gracias a tecnologías digitales como la fotogrametría, podemos acercar la historia a un público más amplio, tanto en Suecia como fuera de ella, y hacerlo de formas nuevas y muy atractivas.
»Ahora bien, esta tecnología no tiene un propósito en sí mismo para nosotros. Simplemente, nos proporciona varias herramientas potenciales para transmitir conocimientos. La fotogrametría es una de esas herramientas que permite crear modelos 3D impresionantes de objetos, pero si se usan fuera de contexto, como mucho serán solo cosas que luzcan bien en pantalla».
Los Museos Nacionales de Historia asocian sus modelos 3D con información sobre el origen del objeto, su historia, su propietario y su composición, creando así un recurso digital que pueden usar como herramienta para contar historias y transmitir conocimiento.